Salir de la OEA

¿Salir de la OEA?
Esto no es apoyo apoyo a la decisión del burro, no.

Pero hay que ver la profundidad que hemos alcanzado en esta crisis y el tiempo que ha pasado para llegar a este punto. La OEA cambió de secretario general, el anterior estaba ciertamente mucho menos interesado en promover alguna solución al tema venezolano. El actual, ha mostrado total disposición, enfrentándose al séquito de receptores de las dádivas de Venezuela y recibiendo muy poco apoyo de quienes se supone deberían respaldar sus oficios.
Venezuela en 10 años ha pasado de ser el vecino mas generoso, a requerir ayuda internacional para saciar el hambre de su gente y aún para los medicamentos mas esenciales. Ya dejó de ser ese deseable compañero de juergas que no solo pagaba todo, traslados, fiestas, regalos, sino que además, podía solventar cualquier déficit en las finanzas de quienes le juraran “amor eterno”, sacándolos de cualquier atolladero.
Lo anterior es sólo para reflejar que las condiciones para la OEA pudiese resolver o ayudar a resolver el problema en Venezuela, mejoraron exponencialmente. Disminuyó o desapareció la posibilidad de Venezuela de comprar conciencias (o votos), y la gerencia del organismo esta dispuesta a resolver el problema.
Ahora bien, ¿como se reflejó eso en la realidad palpable del venezolano? Nada, cero. Simplemente la forma en que esta estructurada la OEA no le permite resolver, a lo mas que puede aspirar es a ser una opinión importante en el concierto internacional. Es como muchas veces se dijo “un club de presidentes” y simplemente no están dispuestos a crear precedentes que los afecten en un futuro.