¿Democracia o dictadura en Venezuela?
Antes de comenzar y debido a la extrema polarización que existe en mi país quisiera agradecer de antemano a aquellos lectores cuya opinión difiera notablemente de la mía, eviten hacer comentarios. En especial, me refiero a esos comentarios destinados a dejar claro que no piensan, al menos por sí mismos. Los demás comentarios (Si es que los hay, los agradeceré aún cuando no lo haga por escrito.)
Es obvio, que no acepto los resultados mostrados por el ente comicial de Venezuela (CNE) para esta elecciones presidenciales, existen muchas razones para eso. La principal es falta de confianza en dicho organismo. Una confianza que ellos mismos han socavado hasta hacerla desaparecer.
Venezuela está sumida en una de las mayores crisis en mucho tiempo, casi todos los ámbitos del país están sumergidos en profundas crisis de muy difícil solución, ninguna solucionable a corto o mediano plazo. Claro que a eso no se llego de la noche a la mañana.
A los que desconocen la situación política interna en Venezuela les parecería mentira las condiciones en que se realizaron las elecciones, condiciones que a mi parecer fueron groseramente injustas con la oposición. Sin embargo, para la oposición no quedaba otro camino que asumirlas así, tal y como las plantearon los oficialistas.
Escribo esto, tal vez para ver si encuentro una vía, puede ser que por mucho que lo piense y repiense, mi punto de vista no me permite hallar el camino correcto. Ante todo, no entiendo a una de las mitades de mi país (Lógico, en eso consiste la polarización) Esa mitad que yo no entiendo actúa movida aparentemente por un odio visceral a todo aquel que no piensa como ellos, pero es que pensar como ellos es difícil, no tienen una línea de pensamiento sostenida, sino que cambia a cada momento según la conveniencia.
Regresando al tema electoral. La directiva del CNE está conformada por cinco personas (Supongo que dicho número pretendía evitar empates en las decisiones) Debería ser integrado por personas sin una parcialidad política evidente. Actualmente cuatro de los integrantes son abierta y descaradamente pertenecientes al sector oficial y acatan los pedidos de la presidencia en una forma pasmosamente eficiente y rápida. El quinto integrante es un adorno que no se que hace allí, durante un tiempo pensé que al menos serviría para informar las decisiones que se tomaran y que iban en contra de la oposición, pero estaba bien equivocado, o se reúnen sin él o el oculta las decisiones también. en fin un "mirón de palo".
El candidato oficialista hizo una campaña con abundantes y casi ilimitados recursos, sólo su proverbial torpeza lo hizo descender en las encuestas, (por falta de recursos no fue).
Las elecciones se realizaron en unas condiciones increíblemente desventajosas para la oposición, en muchos casos asediados por bandas de motociclistas gritando consignas y uniformados con los colores oficialistas, pretendiendo ahuyentar con dicha actitud y presencia a los votantes del bando contrario.
Luego de este calvario de proceso electoral, ahora se nos pide que aceptamos los resultado que ese CNE tan parcializado emitió, pero que aceptemos callados y sin chistar lo que ellos dicen.
Ahora cuando se pide lo más elemental en este caso, que no es otra cosa que un reconteo de los votos, se nos tilda de golpistas, de incitadores a la violencia, etc. Solo le pregunto a Ud., lector ¿Iría Ud. a un proceso electoral en semejantes condiciones? Me parece que esto de las elecciones en Venezuela no es más que una costosa pantomima.